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Porque los bebes juegan con su popo

Porque los bebes juegan con su popo

Este es un tema que se refiere a un cierto tiempo en el desarrollo de los niños. Muchos adultos responsables de la educación en esta etapa están convencidos de que necesitan corregirlos y por lo tanto raramente preguntan a un especialista cómo deben comportarse.

En los dos primeros años de vida, un niño aprende y conquista todo el mundo práctico a través del movimiento y la actividad constantes y utilizando sus sentidos como una valiosa herramienta de aprendizaje. De esta manera ve, huele y toca todo.

Al final del segundo año de vida, adquieren la habilidad de usar el lenguaje y así se relacionan con los demás, especialmente con los adultos. Por primera vez entienden lo que consideran bueno o malo y cómo aceptan o rechazan su comportamiento. Esta es la base para crear una imagen de sí mismo que será definitiva en su vida adulta. A esta edad las madres enseñan a sus hijos a limpiarse el ano y los genitales y descubren la alegría de drenar o detener las heces.

Basándose en el proceso descrito anteriormente, en la fase de desarrollo en la que se encuentra su hijo, el juego con las heces forma parte del conocimiento que su hijo aprende gradualmente sobre el mundo que le rodea, utilizando la manipulación y el juego. Ocurre en casi todos los niños de esa edad, es natural y no debe ser culpado o considerado como un comportamiento anormal.

A medida que un niño de esa edad comienza a entender las órdenes y reglas de los adultos a través del lenguaje que está aprendiendo, es muy importante ser flexible, mantener una actitud positiva y entender el desarrollo durante el curso para que gradualmente se le puedan enseñar los hábitos de limpieza y rutina de baño sin acusarlo o tratarlo con nombres despectivos que se usan a menudo en estos casos, como caca, sucio o asqueroso. Entre otras cosas, porque etiquetas como estas son muy claras para los adultos, porque son parte del juicio constante que hacen sobre el mundo que les rodea, pero no para un niño que no entenderá por qué sus padres están reprimiendo algo que para él o ella es sólo un juego como cualquier otro.

Los psicoanalistas dicen que la codicia, el derroche de dinero, la obsesión por el orden, la pureza y la perfección, y los muchos tipos de fobias o miedos exagerados que se dan en algunos niños y muchos adultos tienen su origen en los traumas que surgen en esta etapa del desarrollo. Esto se debe a los abusos, a los castigos excesivos de los padres y a otras formas inapropiadas de intervención.

Recuerde que si todo el comportamiento de su hijo tiene un propósito, debe vigilarlo. Comprenderá cuál es este objetivo y podrá ofrecer otros medios para alcanzarlo. Los padres pueden enseñar pacientemente a su hijo la limpieza y el cuidado, y proporcionarle materiales que le permitan experimentar, manipular, tocar y modelar con diferentes elementos y texturas. Déle a su hijo diferentes objetos de diferentes formas y colores, déjelo jugar con el agua, el barro y la suciedad, y no permita que la limpieza de su hijo interfiera con usted. Déjalo que se ensucie mientras juega, que se moje y se manche sin asco. Entonces tendrás tiempo para cambiarte de ropa y bañarlo antes de ir a la cama.

Los niños que son tranquilos y limpios pueden ser bien atendidos socialmente, pero asegúrese de que un niño fangoso, sucio y mojado que goza del amor y la confianza de sus padres, que lo acompañan pacientemente a lo largo de su desarrollo, puede ser más saludable física y mentalmente que los niños que parecen intachables debido al comportamiento forzado o violento de los padres.

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